Aunque nos vayamos a miles de kilómetros, nadie escapará. La familia va con nosotros. Estará ahí siempre, en los hábitos, en los gestos, en las decisiones que tomemos... jamás seremos libres ni estaremos solos.
No importa de donde seas o como te criaron o lo que tengas que pasar, puedes hacer lo que quieras si te lo propones.
Yo estuve muy cerca de rendirme y eso solo prueba que debes resistir, porque justo cuando estás a punto de rendirte ... algo realmente grandioso sucede.